LAS CAMPANAS DE COMPOSTELA

La primitiva basílica de Santiago fue reducida a cenizas por Almanzor cuando éste asaltó la ciudad de Compostela en el año 987. El temido caudillo musulmán había dirigido repetidos ataques contra el norte peninsular quemando y saqueando sus poblaciones a su paso. Las crónicas árabes y las latinas coinciden en que el comandanteandalusí destruyó la basílica, pero respetó la tumba del Apóstol.

Almanzor se llevó las campanas de la iglesia jacobea a la ciudad de Córdoba, sobre los hombros de cautivos cristianos, donde habían de servir de lámparas para la gran mezquita. La leyenda quiso que las campanas regresaran a Santiago acarreadas por cautivos musulmanes 250 años después, cuando Fernando III el Santo tomó la capital cordobesa.

REVISTA HISTORIA DE NATIONAL GEOGRAPHIC